Moisés Menéndez comparte su estudio sobre el dinero electrónico en el "Ágora FIFED"

 

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“Sin dinero electrónico, blockchain se queda en un sistema de mensajería, más allá del mundo cripto”

El pasado 6 de febrero y con no poca expectación, el “Ágora FIFED” se preparó para recibir la visita de Moisés Menéndez, uno de los profesionales más avezados, estudioso de blockchain y visionario, que quiso compartir con el auditorio los avances en sus últimas aventuras empresariales en el mundo Fintech.


Consciente de que los focos están puestos en la identidad digital, para Menéndez el gran tema en este momento es, sin embargo, el dinero electrónico, sin el cual, asegura, “blockchain –tal y como lo conocemos ahora– es un sistema de mensajería, más allá de su uso para las criptodivisas, muy lejos del concepto que algunos manejan de “el internet del dinero” y muchos de “el internet del valor”. “El dinero electrónico se convierte en un elemento esencial para que los smart contracts puedan ser de verdad autónomos, completos, y puedan ejecutar el intercambio de valor. Es la verdadera alternativa a las “stablecoins”, que están proliferando para paliar esta enorme limitación y que presentan grandes dudas de legalidad, muy obvias, al menos, en Europa”, puntualizó.


El abogado, quien subrayó que venía con los “gorros” de socio de Everis Initiatives, responsable jurídico de BilliB, secretario de la Entidad de Dinero electrónico SEFIDE y cofundador de la recientemente creada empresa de inversión en proyectos blockchain IoBuilders, comenzó su exposición repasando ciertos conceptos claves y mostrando a los asistentes el comportamiento de los españoles en sus formas de pago y la evolución de los últimos años.


“El dinero electrónico no es una tarjeta, un mero medio de pago, es, literalmente, según la propia normativa, la tercera clase de dinero: hay dinero efectivo, dinero bancario y dinero electrónico y todos ellos son unidad de cuenta, tienen la capacidad de atesorar valor y son un medio de pago”, aclaró el también consejero del Observatorio Fintech Legaltech de la Universidad Pontificia Comillas ICAI-ICADE.

Según los últimos datos del Banco de España (de 2017), los dos grandes entornos de pago en los que se mueven los españoles, además de la preminencia del uso del efectivo, son las cuentas (SNC-iberpay) y las tarjetas (Redsys y otros), si bien las estimaciones apuntan a que en la próxima década, siete de cada diez pagos en el mundo se harán con dinero electrónico (especialmente, debido a su generalización en los continentes asiáticos y africano, donde los sistemas de pago evolucionan de manera completamente distinta). Del mismo modo, la forma de pagar en el punto de venta “estático” tradicional, apoyado en el uso del TPV, virará en una forma más “fluida” (generalizándose el uso del código QR o pago a través del móvil) para, en pocos años, directamente desaparecer como una tecnología obsoleta (y ser sustituida, por ejemplo, por el escaneo directo del código de los productos como forma de pago).


El hasta hace unos meses miembro de la Junta Directiva de Alastria presentó al “ágora” un sistema de dinero electrónico tokenizado y regulado para cualquier tipo de blockchain (permisionada o pública) a través de diferentes casos de uso.


El abogado empezó introduciendo la aplicación como una nueva herramienta de tesorería corporativa, la cual permite una completa revolución de los sistemas de “cash pooling” o pagos inmediatos. “En el ámbito diario, su impacto puede ser también radical, al transformar la forma de pagar mediante su utilización a través de smart contracts, que implementarán verdaderos contratos ricardianos, en los que la capacidad de “scrow” y “multifirma” revolucionan y hacen mucho más segura la contratación”, dijo Menéndez.


Puso de ejemplo el problema, hoy generalizado, de la no sincronización del pago con la formalización de muchos acuerdos legales. Así, la autorización de la escritura tiene que resolverse en “papel” con el ya “antiguo” cheque bancario para poder simultanearse con la firma y la autorización del notario, ya que si se utiliza una transferencia aparece el riesgo de ejecución. “O la consignación de unas arras o la retención del importe del precio de la compraventa de un coche presentan la dificultad de la gestión y confianza sobre el depósito”, añadió el empresario.


Según Menéndez, todo esto lo arregla una tecnología como blockchain, para la que “había nacido” el dinero electrónico. “El smart contract, como una dirección automatizada en la blockchain, sirve de gestor del depósito y solo lo libera cuando todas las firmas, incluida, por ejemplo, la del notario, y todos los eventos, como un oráculo, han sucedido. “Aquí blockchain no solo reduce los tiempos, hasta ahora larguísimos, sino que, además, genera confianza (los clientes saben en todo momento cómo va el proceso) y ahorra costes”, comentó sobre un proyecto en el que ya está trabajando con Iobuilders y que resumió así: “Se trata de reinterpretar la legislación vigente; utilizar algo que ya tenemos, el dinero electrónico, para hacer realidad esas ventajas, las promesas que nos plantea blockchain”.


Por último, Moisés Menéndez hizo referencia a la utilidad de blockchain para la emisión de dinero electrónico de los bancos centrales CBDC, cuyo potencial de transformación del propio sistema bancario puede ser enorme, tal como recientemente explicaba el exgobernador del Banco de España.